sábado, 8 de febrero de 2014

Capitulo 6 " Letras Desafinadas"








                                  
─¡Papá! ¡Papá! −Aullé de alegría de ver como papi me perseguía.
¡Mi pequeño milagro, no te vas a escapar tan fácilmente !─ los grandes brazos de papá me aprisionaban contra su pecho- ¿Sabes, lo mucho que he esperado para tenerte?.
−Te quiero Wilson Apoyé mi cabeza sobre él.
− ¡Eso sí que no!. Mi hija no va llamarme por mi nombre─ me observa con sus ojazos marrones ─ ¡Guerra de cosquillas!.

−¡No más papá! ¡No más!. − No podía parar de reírme ni dejar de retorcerme.


******
No puedo moverme, no siento mis extremidades.

«¿Dónde estoy?¿Estoy muerta? »

La oscuridad empieza a acumularse, siento mucho dolor.

******

Erase una vez, un comerciante que vivía con su hija en el campo. La muchacha se llamaba Bella mamá estaba muy seriaEn unos de sus viajes, el padre de Bella cruza el bosque, cuando de repente su caballo se mostró inquieto y salió al galope.

Mami, ¿Estás enfadada conmigo? abracé con más fuerza a mi osito Bobi.papá vino conmigo, no me separé de él nunca.farfullé ahogando a Bobi entre mis brazos.




─ ¿Cuántas veces tengo que repetirte lo mismo Alysa? Suspira e intenta relajarse.

«Agacha la cabeza»

«Agacha la cabeza»

¡Mírame a la cara cuando te hablo!   se levantó de golpe de la silla tirando el cuento al suelo   Eres una niña desobediente, solo escucha lo que te conviene. Si te digo que no quiero que vayas al parque, es para evitar que te hagan daño   caminó de un lado a otro   ¿ Conoces el peligro en el que nos exponemos por tu culpa? ¿Sabes el daño que puedes hacerle a los demás?

Asentí mientras escuchaba lo irresponsable que había sido. Es lógico que mamá se preocupe. Estoy enfermita, nadie escucha esa voz mala en la cabeza como yo. Puedo matar a alguien y no quiero que la culpa se la lleven mis papás.

Oh, cariño no quise decir eso   me besó mis ojitos   Tú eres una nena muy buena pero entiéndeme  ¿Sí?. No me gusta que estés por los parques  Me acaricia las mejillas con ambas manos   No llores más, no lo soporto.


******


Bajo una densa niebla, puedo escuchar las voces de una niña pequeña , pero no logro verla.
 Al fondo, creo visualizarla, sentada en el suelo mirando como otros niños le destrozan sus libros y  libretas .
 La rabia y la desesperación que crece dentro a un ritmo bestial.
­−¡Hijos de puta! ¡Parad de una vez!.− Chillo con todas mis fuerzas, sintiendo como el aire abandona mis pulmones otra vez.

******

La puerta estaba encajada,  las ganas de hacer pipí no me dejaban dormir. Me senté en la cama y me puse mis zapatillas favoritas; las de color rosita llenas de mariposas.

Bobi, ahora vengo, voy a ir al servicio- le di un abrazo para que se calmaraNo te pongas nervioso, volveré en seguida.

Una vez dentro del baño, encendí el interruptor y aproveché  para bajarme  con cuidado el pantalón del pijama.

─¡Wilson!. Estoy harta de que la trates como una persona normal. ¿Sabes el lío que tenemos encima? ¿Recuerdas ese contrato? ─ Las voces de mamá me sobresaltaron.

Corrí hacia la puerta de mi cuarto y me asomé un poco al pasillo.



Dennis, joder es una niña al fin y al cabo. No es justo que se quede aquí, encerrada como un animalNunca había escuchado a papá y a mamá discutir por mi culpa.

Will tú y yo sabemos que no es nuestra hija los gemidos de mami me tensaron todo mi cuerpo Agatha sí era nuestra niña, nuestra pequeña. Fui la culpable de que se fuera para siempre.

─   Dennis, amor mío, no te culpes por las cosas del pasado.─ en el fondo sabía que no era su hija, solo fui un reemplazo de un bebé muertoAlysa es lo mejor que nos ha podido pasar, nuestra carrera crece con ella. Es un pequeño milagro.

─ Puede ser todo un milagro, pero estoy fastidiada  de recibir quejas de ese maldito colegio−quiero irme a mi camita, mamá está así por mí , todo es mi culpa−no entiendo lo dócil que se vuelve en casa...

−¡Dennis! No vayas por ese camino, por favor. − papá la interrumpió─ Si controlamos la alimentación, la medicación  y su estado de salud nunca le pasará nada a nadie.

Cuando quise darme cuenta, las lágrimas bajaban por mis mejillas, en silencio. Notaba como la hoja del cuchillo perforaba mi corazoncito. 



En los descansos del cole, me sentaba en un solitario banquito mientras observaba el patio de juegos.

Bren, mira lo que me compraron mis papas ayer− sus brazos no dejaban de moverse.

¡ Cloe! Ese reloj esta súper. ¿Dónde lo compraste? − no dejaban de abrazándose, diciéndose "te quiero".

 Bobi era el único capaz de decirme esas palabras.
******

El brillo de un potente foco hace desaparecer toda esa terrible escena. Me quedo ahí, sola, escuchando los sollozos de esa pobre chiquilla y las risas de esos malditos bastardos.

Me quedo sumida en el vacío.

Un manto blanco se acumula por todo el terreno. Minúsculos copitos de nieve caen desde el cielo, encapotado por nubes grises. El viento acaricia mi rostro, trayendo consigo una variedad de olores frescos y apetecibles.  Tanteo cada rincón de este sitio, dispuesta a marcarlos. Para dar a entender que es solo mío.

«Correr.»

«Correr.»

Acelero todo lo que mis piernas pueden soportar. Mi conciencia grita que no está bien lo que hago; mamá se enfadaría si me viera recorrer todo el prado.

« ¡No me importa! Por una vez en mi vida, voy a dejar de perderme entre los errores que cometí en el pasado . Sé, que no podré arreglarlos; Lo hecho, hecho está.  ¡Que me llamen egoísta o irresponsable!.Voy a regalarle  a mi corazón lo que  ha deseado toda su existencia.»

Deslizándome por la nieve, me dejo caer exhausta.

− This is my December.─ Las teclas del piano suenan dentro de mi cabeza.−Just wish that i didn`t feel like there was something i missed.− Me dejo llevar por esas letras desafinadas, acompañada por mi dulce voz apagada.

******

Mis ojos se abren ante un enorme foco de luz . Estoy desorientada. No tengo la menor idea de donde me encuentro.

−¡Oh, Dios! ¡Mi cerebro me va a estallar!.

«Soy una imbécil. ¿Para qué hablo tan fuerte? Ahora me he destrozado los oídos también».

Miro hacia ambos lados, percatándome de que estoy en el puto patio de la casa.
«¡Sus muertos! ¿Esto qué es? ¿Un cachundeo?. Recuerdo que estaba en... La ducha, sí, sí me lavaba la cabeza. ¿Cómo terminé aquí? »


─Oh, mierda. Algún día me veré en la calle tirada. Esto es peor que una borrachera─ me apoyé en sobre las rodillas − Maldito sonambulismo.

Los trozos de las macetas están esparcidas por todo mi alrededor. Odio que pase todo este numerito  mientras duermo.

Eso de despertarme en sitios diferentes , destrozando todo e incluso con intentos de haberme cortado las venas...

Me jode ver como mi santuario se vuelve  un infierno. No soporto mover nada; mamá era muy exigente a la hora de cambiar un trasto.

Intento con todas mis fuerzas que estas cosas no pasen; ocurren tarde o temprano, no las controlo .

Y pensar, que por un instante creí que eran los infectados─ dije con sarcasmo─ sabiendo que jamás traspasaron mi fortaleza.

Con el paso del tiempo, dejé de tratar de culpar a otros y empecé a culparme a mí; A esa parte  psicópata que forma parte de mi mente, aprovechando cualquier indicio para adueñarse de lo poco que me queda.

« La memoria es lo único que  poseo; lo que no  ha sido capaz de quitarme.  Lo que más desearía que me arrebatara.
Estar secuestrada entre millones de recuerdos dolorosos no es agradable. Te va consumiendo poco a poco, hasta el punto de querer llorar sangre del dolor psíquico tan grande que sientes. »

−Debería darme vergüenza, doblegada , llena de temores, bajando la puñetera vista cada vez que me alzaban la voz− Digo frustrada− Me han querido doblar tantas veces, que ya no sé ponerme derecha.−respiro un par de veces antes de seguir hablando− Me han atado como a un perro privándome, rajándome por dentro que ya ni sé quien soy, ni porque me siento tan desubicada en este mundo.

No, ¡Basta! me niego a sufrir otra vez. Necesito seguir duchándome. Acabar al menos con lo que he empezado, aunque sea.

Según camino, noto el escozor de las heridas. Los hematomas se agrandan, dejando un rastro oscuro por toda la piel desnuda . Las uñas han desaparecido; supongo que las manchas de sangre y los arañazos de las paredes tienen algo que ver en esto.

« Eres un jodido monstruo, no quieres a nadie, ni a ti misma»

−He destrozado la casa−Cubro mi cara con las manos− no puedo soportar lo que soy, lo que me he convertido a lo largo de estos 7 años de abandono−temblando como una hoja, subo las escaleras cojeando−Debería haber muerto, papá y mamá no se merecían una hija como yo.

El agua de la ducha sigue cayendo. Me adentro con cuidado, evitando cualquier golpe que rozara los dedos morados de mi pie.

 Mis sollozos volvieron, acompañados de arcadas. Asco, repulsión de ser lo que soy. Querer ser normal, cuando solo soy una enferma secuestrada por remordimientos.

−Quiero matarlos, sí, retorcerles el cuello− apreté mis puños olvidando el dolor por la ausencia de uñas− Si esos bastardos no los hubieran matado, estarían conmigo me protegerían de la bestia, de la parte depravada que forma parte de mí.

                                             


A través de la mampara, veo una brecha en la frente, cicatrizando con rapidez. Me enjabono con cuidado; evitando cualquier corte reciente.

Al terminar de quitarme los restos de jabón, meto mi ropa para lavarla.

−Me encanta vestirme con la ropa recién lavada, el aire veraniego hace que sude como una cerda- contengo la respiración mientras froto la camiseta− bueno, la verdad no sé cual es peor, el  del sudor o el de cuando estoy cachonda.

No estoy diciendo que tener la regla sea asqueroso. La primera vez que me pasó era ingenua. El olor era denso, caliente, no podía parar de rozarme por todas partes. Esos días, tenía que dejar de lado  libros y revistas. Me sentía muy extraña, mi ropa interior siempre estaba mojada, creí por un instante que me había hecho pipí. Después, vinieron los sangrados...

Me vuelve loca la sangre, pero esa en concreto ¡No!. Ni soñarlo.─ niego la cabeza de un lado a otro.

Cuando consigo dejar la ropa sin algún rastro de olor, vuelvo a ponérmela .
Por curiosidad,  me quedo mirando mi rostro en el espejo, las lágrimas  siguen bajando. Mi cara está llena de moretones y rozaduras. Una de mis cejas, apenas logra verse. Duele, duele demasiado, pero no me importa. El dolor físico no tiene nada que ver con el dolor interno.


« Los golpes no significan nada, las hostias solo me hacen ser más fuerte.»
El tono gris azulado de mis ojos no delatan emociones, ni sentimientos. Al igual que mi pequeña nariz, los gruesos labios, sobretodo el superior también tiene una cicatriz. Los dientes siguen intactos, no tengo ninguno partido, gracias a Dios. ¿O al Diablo?.

El sonido de las llaves cerrando la puerta de mi casa, alertan algunas sombras.  Empiezo a moverme deprisa, creando un patrón.

Un poco de ejercicio no me vendría nada mal para despertarme Ejercito  muslos y piernas controlando la velocidad─ Jodidas tormentas de verano, ni crea que va a dejarme sin desayunar.  

 Por un momento, siento como si algo o alguien me vigilara, aunque no le echo cuenta. Estoy sola en esta ciudad, solo tengo a mis infectados dispuestos para tomar su primer desayuno mañanero.

******
Los destellos de los truenos colorean el cielo, anunciando la llegada de fuertes lluvias. Muchos de los cuervos apoyados en la parte plana de los viejos edificios alzan el vuelo, presintiendo el gran aguacero que está a punto de caer.

Conforme van despejando la zona, mayor probabilidad de que el tiro sea mucho más limpio, certero. El punto de mira, señala con precisión una densa cabellera oscura, la fresca brisa del oeste mueve con intensidad esos mechones , dejando ese olor a mar mezclado con una fragancia natural, desconocida, aunque exquisita para cualquier macho en celo.

Una fina nariz acaricia de vez en cuando el fusil M24 con sumo cuidado. Una a una,  las gotas de sudor  viajan por el entrecejo, recorriendo su fina capa de barba hasta llegar a los labios, tensos, secos y agrietados.

─Eso es pequeña bastarda, respira por última vez antes de que te vuele los sesos─ Dice con voz ronca , pasándose su lengua sobre los dientes, humedeciéndolos.
─Eso es cariño, date la vuelta, déjame imaginarme como me corro en esa repulsiva cara mientras te meto un tiro en la frente "─con la mano libre se baja los pantalones impaciente.

Toca con suavidad el gatillo, mientras se masturba bajo la intensa lluvia.
De repente, siente como  el clímax abraza su cuerpo , dejándolo vulnerable,  listo para el siguiente asalto.

─ Uno, dos, tres...─Cuenta en silencio, esperando el momento y aprieta el percutor con suma facilidad.

lunes, 27 de enero de 2014

IMPORTANTE

PRÓXIMAMENTE HABRÁ UN CAMBIO IMPORTANTE EN EL TÍTULO DE LA NOVELA PARA EVITAR ALGÚN TIPO DE PLAGIO.
NOMBRE ORIGINAL => SANGRE OSCURA, SANGRE CONTAMINADA.

NOMBRE QUE LLEVARÁ A PARTIR DE LOS SIGUIENTES DÍAS=>

"SECUESTRADOS ENTRE RECUERDOS" 

lunes, 16 de septiembre de 2013

capitulo 1



Un nuevo día amanece en la ciudad de San francisco (California). Unas densas nubes de color gris bastante oscuro cubren todo el cielo.

De repente, millones de gotas van cayendo lentamente en los techos de algunos coches, abandonados y rotos en medio de la calle.
Muchos de ellos todavía tenían a sus dueños dentro, sin vida , pudriéndose sin ninguna esperanza de darles una sepultura digna.



Cada gota de lluvia por si sola apenas merecía la pena, pero todas juntas creaban una perfecta sinfonía, capaz de hacerte olvidar por un instante como murieron esas personas, hasta que tu mente vuelva a llenarse de esos malos recuerdos.

Siete años y seis meses atrás, nadie sabía del peligro, la gente enfermaba todos los días así que no le dieron la más mínima importancia; se taparon los ojos y lo dejaron pasar. Todos estaban felices de que al fin pudieran librarse del cáncer. Esa enfermedad capaz de llevarse en poco tiempo a una persona a la tumba y que los científicos, luchaban a diario para encontrar alguna cura para ella.


Con tiempo y dedicación, una pareja de científicos consiguieron descubrir esa milagrosa cura, al menos es lo que mostraban en ruedas de prensa.

Al extenderse más la noticia, empezaron a aparecer muchas preguntas como el simple hecho de saber de dónde se consiguió dicho milagro. Sus respuestas eran continuamente distintas. Empezaron diciendo que eran gracias a las células madre, después comentaron los beneficios que poseían algunos alimentos para evitar el desarrollo de dicha enfermedad, sin embargo, nunca mostraron pruebas de cómo llegaron a esas conclusiones. A parte de que las personas se conformaban con ver los vídeos con los resultados de dichos experimentos que la joven pareja brindaba.

La polémica entre otros médicos no tardaron en salir a flote. Los debates eran continuos, la gran mayoría de los doctores, no aceptaban esta “cura” como algo beneficioso para el ser humano. La falta de información sobre esa medicina, no lograba convencer a los demás científicos de que podía curar el cáncer.
Los meses seguían pasando, se realizaban millones de estudios que solo mostraba las propiedades que ese medicamento tenía y efectivamente era capaz de conseguir curar el cáncer.    
Cuando por fin empezaron a comercializar el medicamento, el cáncer empezó a disminuir en todo el planeta. Todo era un gran éxito,una lluvia de millones de dólares empezó a caer. Al fin y al cabo aunque sea un beneficio para el ser humano nunca dejaría de ser también un gran negocio a su vez.

Lo que no esperaban era lo que vendría más tarde, 6 meses después aproximadamente.

Los síntomas eran comunes, parecido a un resfriado o una gripe;
1. Mucha fiebre.
2. Dolores musculares.
3. Malestar general.
4. Diarrea.

A siempre vista, millones de personas con gripe no era un problema, pero con  el paso de los días, los síntomas fueron empeorando con:

1. Ataques de ira.
2. Pérdida de memoria constante.
3. Debilidad en el sistema inmunológico.
4.Vómitos desagradables, con un color oscuro y con una consistencia espesa.
5. Infecciones severas.
6. Pérdida del cabello.

Cuando llegaban a esta etapa, el paciente no era consciente de lo que hacía, estaba completamente loco y atacaba a todo el mundo, esto fue la alarma que empezó a crear el pánico a la población.

Al principio, la enfermedad tardaba en aparecer un mes o mes y medio, pero el tiempo era diferente cuando una persona estaba expuesta a otra infectada.
Los síntomas aparecían a la hora pero de una manera más intensa que la persona que tomaba el medicamento.

La joven pareja estaban encantados de haber descubierto la cura contra el cáncer pero sin que se dieran cuenta de sus actos, crearon una bacteria capaz de acabar con el ser humano.

Los segundos, minutos y horas se convirtieron en un auténtico caos, el ejército tuvo que cancelar todo tipo de vuelos y viajes, necesitaban controlar las zonas afectadas rápidamente pero desgraciadamente los intentos fueron inútiles.
Personas cuerdas e infectadas se volvieron locas e inestables, la policía de cada ciudad no podían controlar las masas enfurecidas, con órdenes exclusivas a matar si alguna persona sobrepasaba los límites de la barrera.

Por un momento, el tiempo se detuvo para todo el mundo, una chica cubierta de sangre lloraba desesperadamente pidiendo ayuda, su madre ya tenía claros síntomas de que estaba infectada.

Su hermano pequeño se encontraba a pocos metros de ella, aferrándose a su pequeño osito de peluche sin tener valor de mirar a su madre, mientras ésta caminaba hacía él.




Su expresión ya no transmitía nada, apenas reflejaba algo humano, las gotas de sangre caían de sus ojos, blancos como la nieve, mientras se autolesionaba llevándose las manos a su cara, enterrándose sus uñas en su pálida piel, carente de dolor.

Su hijo cada vez se aferraba más a su osito, imaginando que su mamá solo venía a abrazarlo y a decirle que "todo estaba bien".
Su hermana en un intento por salvarlo,  cogió el arma del policía que veía la escena impotente. Sus lágrimas bajaban por su rostro llamando a su madre una y otra vez.



Sus manos temblaban, mientras sus labios temblorosos rezaban a dios por lo que estaba haciendo.

"Dios mío...Perdóname, por lo que voy a hacer...lo siento, lo siento, lo siento" cerró sus ojos por un momento y comenzó a disparar, todo en presencia de su hermano.

No puedes saber, la impotencia y el sufrimiento que es matar a un ser querido. Pero más trágico es matar a la que te llevo 9 meses en su vientre. Entonces, ¿Qué podría sentir una persona, cuando no ha sido la enfermedad la que se ha llevado a sus seres queridos?

En un parque no muy alejado de la ciudad, se puede contemplar la silueta de una muchacha arrodillada frente a dos tumbas, sus lágrimas son evidentes, al parecer esas personas eran muy importantes para ella.

Lentamente se pone de pie y contempla ese cielo de color azul, después haber cesado la tormenta hace poco. No tiene necesidad de mirar a ningún lado, los conoce y ellos también por muy podridos que puedan estar.

Con el arma apoyada en el hombro derecho, empieza a caminar a un ritmo tranquilo, con clara intención de volver a su casa, que un día creyó que era su hogar, pero ahora solo son ruinas plagadas de monstruos al igual que ella.
 




https://www.facebook.com/SangreOscuraSangreContaminada

skype ==> Enmaandersonnovela

twitter ==> https://twitter.com/Enmaanderson



















viernes, 19 de julio de 2013

CAPÍTULO 5 PARTE 2

CAPÍTULO 5 PARTE DOS

El pasillo de la entrada, no posee nada de atractivo, carece de fotos, solo uno relacionado con un vestido sencillo de una mujer. Mamá no era una excelente fotógrafa, solo las hacía  de vez cuando, para relajarse, mientras escuchaba un poco de música clásica.


...”Solo eres desecho, te mereces estar en el infierno...”

Paulatinamente, subo la vieja escalera de mi casa apoyándome en el soporte de acero. Por un momento, observo mis manos, grandes, finas, los callos son visibles.

-" ¡Joder! Valiente mierda de parquet, está putrefacto ya mismo tendré un ecosistema debajo de esta asquerosidad, hasta el yeso parece que está jodido"- Exclamó mientras los crujidos se incrementan con cada paso.


Cuando llego a la segunda planta, puedo visualizar todo el pasillo. Esta vez el suelo no lo complementa el parquet, sino losas blancas con líneas negras; semejante al tablero del ajedrez. Ese juego...Recuerdo que papi jugaba, le ayudaba a concentrarse después de una dura jornada de trabajo.

” Que lástima ser tú, eres tan inferior y mediocre”

El tono albino de las paredes y de las columnas no dan una impresión alegre, al contrario, es monótono, aburrido. Lo único que decora todo el pasaje es un simple mueble de madera . Las tres puertas tienen la misma tonalidad que ese trasto; dando un aspecto antiguo, sobrio.

Al final del corredor, accedo a la sala de estar. Medito y observo todo el habitáculo. Mis ojos se posan en esas cuatro ventanas colocadas una al lado de la otra. En el centro, se encuentra un sofá lleno de libros, la alfombra cubierta de polvo cubre gran parte del suelo al igual que la estantería llena de álbumes familiares.



 …” ¿Familiares? ¿ Te refieres a esas personas que tú destrozaste?... ¿De qué te sirve matar a ese asesino, cuando tú misma los has matado también?...”
                                 
El lugar es espléndido, maravilloso. De pequeña, solía entrar aquí, para ver el amanecer.


Ojeando un álbum, no pude evitar ver una foto que me llamó la atención; una simple imagen capaz de transmitirme una pizca de paz


-"Papá, ¿Por qué no puedo sentir nada? Quiero quererte, siempre he querido hacerlo, ¿ Por qué solo he deseado matarte ?..."- Repito las palabras en voz alta, queriendo escuchar una respuesta coherente o simplemente volver a oír la calidez de su voz. Las yemas de mis dedos rozan su hermoso rostro, sus ojos estaban cerrados pero sentía que me miraba, solo a MÍ, a su " princesa" como él me llamaba, dándome amor a pesar de todo.

No recuerdo cuantos meses tenía, era demasiado bebé para saberlo con certeza. -" No logro entender como en una simple hoja de papel, puede llegar a ser tan palpable esa seguridad que ansío de verme sujeta, protegida."- Ese nudo en la garganta impide que las palabras salgan al exterior . Sé cómo va a terminar esto, así que opto por colocar el álbum en el estante; Como a mí me gusta, que todo esté en el lugar que les corresponde.  

...” No te mereces ni una pizca de cariño que te dieron...”


 Por un segundo, aparto la vista y me centro en la chimenea eléctrica.
En invierno, el clima en San Francisco es bastante frío, al principio no lo notabas, pero ahora, al no haber electricidad no te queda otra que taparte con una manta.

Después de recorrer la estancia con la mirada, salgo del estudio, dirigiéndome al baño.

-"Necesito asearme, anhelo eliminar el hedor a muerte de mi cuerpo por un par de minutos."- gruño mientras huelo la ropa. -"Bueno, aparte de olor a carne podrida mi sudor no se queda atrás, puedo olerlo a un kilómetro de distancia".- Arrugué la nariz y alejé mi brazo de inmediato.
   
Enfrente de la puerta central, giro el pomo con cuidado.
El color claro abunda en todo el cuarto. Las velas perfumadas adornan la escena dando un toque de romanticismo en el ambiente. La mampara de cristal transparente rodea toda la bañera al igual que la ducha. Sin embargo, lo que atrae más mi interés es el gran espejo, acomodado por encima del lavabo. Cualquier persona puede ver su propio reflejo, yo en cambio puedo ver mi yo interno, a esa diminuta chica maltratada por niños engreídos, egoístas.

Supongo que mi edad ronda los diecisiete. No necesito saber el día en el que estoy ni el año en el que vivo, carece de importancia, el tiempo se detuvo hace bastantes años y no creo que vuelva a moverse...

 Me empiezo a desvestir a conciencia. Los pantalones de chándal negros, la camisa blanca, calcetines grises, las bragas oscuras, el sujetador beige; caen al suelo provocando un seco golpe.


...“ Sus miradas de pánico, el crujir de sus huesos, el sabor de la carne..¡Reconoce que solo enterraste sus cabezas!"...


Cuando abro la ducha, el torrente de agua no tarda en salir. Mis manos empiezan a trabajan acariciando el cuerpo, los  pezones se endurecen al sentir el agua fresca deslizarse por mis redondos pechos, el líquido transparente desciende sobre mi vientre plano surcando por las miles de cicatrices y quemaduras que adornan mi reseca e irritada piel.

Frente a mí, se encuentra la estantería donde localizo el champú. Deposito un poco en mi cabeza y lo dejo otra vez en su sitio. Me rasco con las uñas, desenredando con mis dedos los enredos de mi lacio cabello.

 -" Ohm, que gusto madre mía..."- Mis suspiros me delatan. Dejo que el movimiento continuado de mis manos prosigan, relajando mi cuerpo, mi inexistente alma y mi podrido corazón.     

En la lejanía, puedo escuchar esas voces; recuerdan lo que soy,  lo que tengo ahora y lo que perdí por no protegerlo de de mí. Las acusaciones no tardan en llegar. Destrozan todo a su paso como si fuese un tornado.

-.”¡Yo no fui!”-.exclamé irritada.- “¡Joder, no fue mi culpa, dejarme ya! ¡Dejarme de una puta vez en paz!”.- Las amargas lágrimas caen por mis pálidas mejillas, el agua que cae sobre mi cuerpo se transforma en sangre espesa y llamativamente roja, el reflejo de la mampara me muestra una imagen de mí tragando un órgano tras otro.

Salgo de la ducha tropezándome con algo que ni sé lo que es. En el suelo, no logro recuperar el equilibrio. Me vuelvo pequeñita, indefensa, vulnerable. Mi respiraciones son bruscas e irregulares, no consigo respirar, me falta el aire. Los recuerdos se convierten en minúsculos flashes.

" Yo destrozando el cuerpo de mis padres".
"Yo mordiendo brazos, piernas, cuellos".
"Yo abriéndoles el estómago a base de mordiscos y arañazos."
   
El frío recorre cada centímetro, tensando mis músculos calándome incluso hasta los huesos. Siento como un dulce sabor llega a mi boca, muerdo mis  delgados labios por instinto, no controlo mi fuerza, me hago daño y noto la sangre deslizarse por la garganta. Me quedo hecha un ovillo. Las lágrimas mezcladas con ese liquido rojo que me vuelve loca siguen descendiendo.

-" Ayuda por favor, no pude controlar mis acciones, llevaba días sin comer y....No sé, no era yo, no podía llegar a comerme a papá y a mamá .- Los nervios se apoderaron de mí, me balanceaba dejando que mi cabeza chocara con la pared una y otra vez. La frente me arde, me quema.   

Noto que alguien me toca, me acaricia, me susurra al oído.

-" Todo va a estar bien cariño, estamos a tu lado eres y serás nuestro pequeño milagro..."- Las suaves voces de mis padres me consuelan.
-"Míranos, verás que estamos contigo, somos una familia ¿Recuerdas? Aunque nos hayas devorado"- La cariñosa voz de mi madre me relaja, siento como me acaricia el pelo.

 Abro mis ojos , veo sus pies llenos de barro y mugre. El olor es asqueroso, un charco de mierda se esparce por todo el suelo manchando mis piernas, salpicándome en la cara.

 Mi mirada sube, los veo frente de mí. Mi corazón está acelerado. El dolor es insoportable.

¡Bum, Bum! ¡Bum, Bum!

Sus brazos están lleno de mordiscos, los gusanos e insectos se posan en ellos. Los zumbidos, el sonido al masticar la carne me taladra los oídos.

¡Bum, Bum! ¡Bum, Bum!

-"¡IROS, IROS DE AQUÍ! ¡NO! ¡MARCHAOS!¡MARCHAOS!"- Grité con todas mis fuerzas.

  ¡Bum, Bum! ¡Bum, Bum! ¡Bum, Bum! ¡Bum, Bum!

No logro enfocar bien, veo, veo, que me miran. No tienen ojos...

¡Bum, Bum! ¡Bum, Bum!

Todo se vuelve negro, en el silencio logro escuchar algo.

-"¿Por qué? ¿Por qué? ¿Por qué?..."


¡Bum!








Skype => Enmaandersonnovela